La UACh y sus cariños malos: Noticia, rigor y subjetividad.
"Quien te quiere te aporrea", reza el dicho que por ser persistente y conocido no deja de ser contradictorio y perturbador.
Cuando
parte de una sociedad se manifiesta y moviliza para demandar cambios las
distintas instituciones que forman el tejido social se ven de una u otra manera
involucradas o afectadas, directa o indirectamente, por la inquietud social. En
este contexto se dieron el año pasado una serie de movilizaciones denominadas
genéricamente “Movimiento Estudiantil”, movimiento que produjo efectos a nivel
general de país, ya sea en los propios estudiantes –universitarios y
secundarios principalmente-, el Gobierno, la Política y las instituciones, fundamentalmente
las universitarias, como la Universidad Austral de Chile que es, sin lugar a
dudas, la Institución Universitaria más importante de nuestra Región de los
Ríos.
Entre
los efectos más relevantes están sin duda la serie de cambios que debió
implementar el gobierno para dar respuesta a las demandas de los estudiantes,
demandas que contaban claramente con un masivo respaldo de la ciudadanía en
general. Las transformaciones solicitadas o las acciones tendientes a que ellas
se produzcan están en marcha para gusto o disgusto de quienes demandaban los
cambios o de quienes, por el contrario, se oponían a ellos y en lo fundamental
esos cabios buscaban mejorar el acceso, el financiamiento y la calidad de la
educación en Chile, tarea que por cierto es compleja y de largo aliento.
En
el contexto del Movimiento Estudiantil del 2011 todas las universidades
integrantes del Consejo de Rectores de las Universidades de Chile –CRUCh- o
también conocidas como “tradicionales”
entraron en una fase de paros y tomas de los recintos universitarios de lo cual
la UACh no estuvo exenta y las consecuencias, de todo orden, de esas
movilizaciones aún se sienten este 2012. Entre las efectos del movimiento, sin
duda, se cuentan el académico, el económico-financiero y el comunicacional e
informativo entre otros. Respecto del último efecto citado es absolutamente
lógico ver la multiplicidad de informaciones e interpretaciones que se dieron,
dan y se darán respecto del Movimiento Estudiantil, sus causas, efectos, acciones
y protagonistas. Desconocidos pasaron, en virtud el movimiento, a la categoría
de reconocidos líderes y otros en cambio mantuvieron o sacaron patente de
verdaderos villanos. Son los efectos de la inevitable diversidad y subjetividad
de las visiones que hay en Chile respecto del Movimiento Estudiantil.
En
el caso de la Universidad Austral de Chile la actividad comunicacional durante
el movimiento fue ardua e intensa (por decir lo menos), se sucedieron una serie
de acciones comunicacionales protagonizadas por autoridades, estudiantes,
docentes y trabajadores de la Universidad así como también por los medios de
comunicación -locales y nacionales- que en la medida de sus capacidades e
intenciones y que, respondiendo a sus líneas editoriales, dieron cuenta a la
ciudadanía de los hechos con mayor, menor -o en algunos casos- sin ningún rigor
profesional. En este contexto, los estudiantes, las autoridades, los docentes y
trabajadores de la UACh debieron dar la batalla para que su visión de los
hechos llegara a la ciudadanía.
La
Universidad Austral de Chile es, una Corporación de Derecho Privado –sin fines
de lucro- dedicada a la enseñanza universitaria y que, desde su formación, fue
concebida y ha mantenido inalterable su irrenunciable e indesmentible vocación
pública. La UACh es, sin lugar a dudas, largamente la institución más
importante de la Región de los Ríos y es una de las 5 Universidades más
importantes de Chile, por ejemplo en el tema de la Investigación. Genera
empleo, forma profesionales, científicos, humanistas y hace un extraordinario
aporte desarrollando docencia, investigación y extensión, en suma, generando
conocimiento y cultura, aporte del cual no sólo se beneficia la Región sino que
todo el país.
Con
un presupuesto anual que bordea -pesos más pesos menos- unos $70.000.000.000., cifra
incluso mayor que el Presupuesto del Gobierno Regional, es un verdadero dínamo
generador de actividad económica y financiera. Su equilibrio, prestigio y
solidez en estos aspectos llevó por ejemplo a que, en el momento más álgido de
la movilización del 2011, siguiera siendo -sin inconvenientes- sujeto de
crédito para la banca nacional en momentos que a instituciones como la
Universidad de Chile, u otras de ese nivel, la banca no daba créditos por lo
feble de sus estructuras económico-financieras.
Sin
duda que los efectos institucionales, académicos y económico-financieros del
Movimiento Estudiantil también se dejaron sentir en la UACh pero, esas consecuencias
han sido manejados sin ponerse una venda en los ojos con rigor, eficiencia y
eficacia por sus autoridades y Cuerpos Colegiados (Consejo Académico y
Directorio) quienes tienen como meta mantener el prestigio institucional, su
calidad académica y el equilibrio presupuestario bases sobre las cuales se
cimenta la solidez, el respeto y el reconocimiento que se ha ganado la UACh.
Prorrector de la UACh, Juan Omar Cofré Lagos. |
Frente
a estos hechos, que son indesmentibles, aparece como inexplicable y poco
rigurosa la forma cómo algunos periodistas locales, y que por serlo deberían
estar al tanto, conocer y manejar en profundidad las estructuras y la realidad
de nuestras instituciones o, al menos, darse el trabajo de indagar
profesionalmente y con rigor sobre ellas e informar nítidamente los hechos y
los dichos respecto de lo que pasa, por ejemplo, en la UACh. Lamentablemente
esto no siempre es así; para muestra un botón. Durante la ceremonia de
recepción de los nuevos estudiantes que ingresaron este 2012 a la Universidad,
el 16 de marzo pasado, se hicieron algunas alocuciones, entre ellas las del
dirigente estudiantil Rodrigo Cósimo quien en parte de su discurso señaló “…estamos
en tiempos de cambio y, sin duda, la Universidad no puede ir al margen de esos
tiempos. Tenemos que saber, los estudiantes, con mucha astucia seguir involucrados
e involucrar al resto de la sociedad para lograr que se estas transformaciones
se cumplan…”.
Por su parte del
Prorrector Juan Omar Cofré en parte de su intervención manifestó “…los
estudiantes han puesto sobre el tapate de la vida nacional un problema que este
país tiene que atender, que es el problema de la equidad y la calidad de la
educación en todos sus niveles y hemos de estar contentos y satisfechos porque,
en efecto, hay sensibilidad gubernamental para enfrentar estos problemas y se
está trabajando en ello…” y, en otro acápite de su discurso señala “…que
la Universidad Austral de Chile hace un esfuerzo muy importante para mantener
el bienestar de los estudiantes y que la UACh es de gran prestigio, de gran
calidad y una Universidad pública que además hace suyo los problemas de la
Nación, los problemas sociales pero, que sabe tratarlos dentro del orden y la
legalidad…”.
Posterior
a los discursos una periodista de una reconocida cadena nacional de radios se
acerca al Prorrector de la UACh, Juan Omar Cofré y le solicita una nota, la
consabida “cuña” que todo periodista busca. El Prorrector accede y la
periodista, entre otros aspectos, pregunta: “…si era muy grave la situación
que enfrentaba la Universidad por la enorme diferencia entre los cupos y los
matriculados…”, frente a la consulta el Prorrector de la UACh, Juan
Omar Cofré, responde que “…no existía tal diferencia enorme ya que,
en realidad, la diferencia era mínima y suele suceder todos los años y que
incluso este año la UACh tiene más matriculados que el año pasado…”.
La
periodista hace otra pregunta: “…qué es lo que va a hacer la Universidad
con los miles de millones de déficit que tiene…”, el Prorrector Juan
Omar Cofré responde: “… señorita, usted está equivocada, la
Universidad no tiene miles de millones de déficit, la Universidad tiene algún
déficit pero, es manejable y la autoridad lo está trabajando y que no producirá
daños significativos a la Universidad…”.
Luego
de ello, en la página web de la cadena radial se podía leer la redacción de la
periodista y escuchar -editados- parte de los audios de la nota: “…fueron
cerca de mil millones de pesos –dato que incorpora la periodista
haciéndolo aparecer en boca del Prorrector- los que la Universidad dejó de recibir
debido a la toma de más de tres semanas y a los paros que ocuparon gran parte
del año. Sin embargo Cofré indicó que las pérdidas económicas son
insignificantes en relación a las ganancias sociales de una movilización
estudiantil como ésta. Cofré señaló que con un presupuesto de la Universidad
que alcanza a los 70 mil millones de pesos, los mil perdidos el año pasado no
son nada que se deba lamentar…”.
Cada
quien puede sacar sus propias conclusiones respecto de cómo se tratan algunas
materias y dichos de autoridades de la UACh por parte de algunos medios y de
uno en particular, sin duda que hay aquí un cariño malo, uno de esos cariños
que atendida, tal vez, alguna querella personal hace uso del periodismo como
arma de revancha. Manipular y tergiversar los dichos de alguien para generar
impacto o audiencia no es muy elegante y al final sólo deja mal parado al
tergiversador ya que con esas demostraciones lo único que hace es poner en duda
su calidad y rigor profesional ya que al desinformar demuestra mala Fe o
incapacidad de desprenderse de la subjetividad, los personalismos o el seguir
sin ningún juicio crítico la línea editorial de su medio. El mal periodismo se
nutre cada día de hechos como éste y lo único que resta hacer frente a ello es
mantener una saludable distancia de aquellos medios que acomodan ciertas
realidades a lo que ellos o sus periodistas quieren ver.